Este solomillo de res en salsa cremosa es uno de esos platos que parecen sacados de un restaurante, pero se preparan perfectamente en casa con pocos ingredientes y una técnica sencilla. La carne queda tierna y jugosa, envuelta en una salsa espesa y sedosa a base de crema de leche, cebolla y mostaza, con un sabor profundo y reconfortante que convierte cualquier comida en un momento especial.
La clave de esta receta está en respetar los tiempos de sellado de la carne y en cocinar con calma la cebolla para que libere su dulzor natural antes de incorporar la crema y la mostaza. A continuación encontrarás una versión ampliada, detallada y explicada paso a paso para que el resultado sea siempre consistente, aunque no tengas mucha experiencia en la cocina.
Ingredientes
- 500 g de solomillo de res
- 1 taza de cebolla picada
- 2 cucharadas de mostaza
- 1 taza de crema de leche
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
Tiempos aproximados
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocción: 30 minutos
- Tiempo total: 40 minutos
- Rinde: 4 porciones
Instrucciones detalladas paso a paso
Preparar la carne y los ingredientes
Saca el solomillo de res del refrigerador unos minutos antes de empezar, para que pierda un poco el frío y se cocine de forma más uniforme. Sécalo con papel de cocina para eliminar el exceso de humedad; esto ayuda a que se dore mejor.
Corta la cebolla en trozos pequeños y uniformes hasta obtener aproximadamente una taza. Ten lista la mostaza, la crema de leche, la sal y la pimienta para ir utilizándolas sin prisas a medida que avances en la receta.
Sazonar el solomillo
Coloca el solomillo sobre una tabla limpia. Sazona generosamente por todos los lados con sal y pimienta al gusto, frotando ligeramente con las manos para que la sazón se adhiera bien a la superficie de la carne. Este paso es fundamental para que la carne tenga sabor en cada bocado. Puedes dejarla reposar unos minutos mientras calientas la sartén.
Calentar el aceite y comenzar la base de la salsa
En una sartén amplia y de fondo grueso, calienta las 2 cucharadas de aceite de oliva a fuego medio. Espera a que el aceite esté bien caliente, pero sin que llegue a humear, para que tanto la cebolla como la carne se doren correctamente.
Cuando el aceite esté listo, añade la cebolla picada.
Sofreír la cebolla hasta dorarla
Cocina la cebolla a fuego medio, removiendo con frecuencia. Primero se verá translúcida, luego comenzará a tomar un tono dorado ligero. Continúa la cocción hasta que esté bien dorada, suave y ligeramente caramelizada.
Este proceso puede llevar varios minutos y es importante no apresurarlo: cuanto más se desarrollen los azúcares naturales de la cebolla, más sabor tendrá la salsa cremosa que acompañará al solomillo. Si ves que se pega un poco al fondo, baja ligeramente el fuego y remueve con más frecuencia.
Dorar el solomillo de res
Cuando la cebolla esté bien dorada, haz un espacio en el centro de la sartén o retírala momentáneamente a los bordes para hacer sitio a la carne.
Coloca el solomillo en la sartén, asegurándote de que tiene contacto directo con el fondo caliente. Sella la carne a fuego medio-alto, dejándola quieta unos minutos por cada lado para que se forme una costra dorada y sabrosa.
Ve girando el solomillo para dorarlo por todos sus lados. Este sellado ayuda a conservar los jugos en el interior y aporta un sabor tostado que será la base del carácter del plato.
Incorporar la mostaza
Una vez que el solomillo esté bien dorado por fuera, baja ligeramente el fuego. Añade las 2 cucharadas de mostaza directamente a la sartén.
Con la ayuda de una cuchara de madera, mezcla la mostaza con la cebolla dorada, impregnando ligeramente la superficie de la carne. La mostaza aportará un toque ácido y aromático que equilibrará la riqueza de la crema de leche que añadirás a continuación.
Añadir la crema de leche y formar la salsa
Vierte la taza de crema de leche en la sartén, alrededor del solomillo y sobre la cebolla y la mostaza. Remueve con suavidad para que la crema se mezcle con los jugos de cocción, la cebolla y la mostaza, formando una salsa homogénea.
Prueba la salsa y corrige el punto de sal y pimienta según tu gusto. La salsa debe quedar suave, ligeramente espesa y bien aromatizada por la cebolla y la mostaza.
Cocinar a fuego lento hasta que la carne esté en su punto
Una vez que todo esté bien integrado, reduce el fuego a suave o medio-bajo. Deja que el solomillo se cocine dentro de la salsa cremosa durante unos 10 minutos aproximadamente, o hasta que alcance el punto de cocción que prefieras.
Mientras se cocina, la salsa irá espesando poco a poco. Remueve ocasionalmente para que no se pegue al fondo y para que la carne se impregne bien de la salsa por todos lados. Si la salsa espesara demasiado, puedes bajar un poco más el fuego.
Reposo y servicio
Cuando el solomillo esté en el punto deseado, apaga el fuego y deja reposar la carne unos minutos dentro de la salsa antes de cortarla. Este reposo permite que los jugos se redistribuyan y la carne conserve su jugosidad.
Luego, puedes cortar el solomillo en medallones y servirlos napados generosamente con la salsa cremosa de cebolla y mostaza. Acompáñalo con tus guarniciones favoritas, como puré de papas, arroz blanco o verduras al vapor, para completar un plato equilibrado y muy reconfortante.
Información nutricional aproximada (por porción)
- Calorías: 450
- Tamaño de la porción: 1/4 de la receta